Reseña y Crítica de la Temporada 3 de "Britannia" (2018)
"Britannia", la serie de fantasía histórica creada por Jez Butterworth, ha regresado con su tercera temporada, sumergiéndonos de nuevo en el tumultuoso paisaje de la Britania del siglo I d.C., donde los romanos y las tribus celtas luchan por el dominio. Esta temporada se presenta como una mezcla cautivadora de mitología, política y drama humano, aunque no sin sus altibajos.
Desde el comienzo de esta nueva entrega, la serie continúa su exploración de los conflictos entre los romanos y las tribus celtas, centrándose en la figura carismática de Kerra (interpretada por Kelly Reilly) y su lucha por liberar a su pueblo del yugo romano. La narrativa se siente más audaz y ambiciosa, con giros inesperados que mantienen al espectador al borde de su asiento. Sin embargo, algunos de estos giros pueden parecer un poco forzados, lo que puede llevar a una sensación de desconexión en ciertos momentos.
Uno de los aspectos más destacados de esta temporada es la cinematografía. La representación visual de los paisajes británicos es asombrosa, con una paleta de colores que evoca tanto la belleza como la brutalidad de la época. Las escenas de batalla están coreografiadas con maestría, logrando un equilibrio entre la crudeza de la guerra y la épica del relato. Sin embargo, en ocasiones, el estilo visual puede eclipsar la narrativa, dejando a los personajes secundarios en un segundo plano.
El elenco continúa siendo uno de los puntos fuertes de "Britannia". Kelly Reilly brilla como Kerra, mostrando una evolución en su personaje que refleja la creciente complejidad de su entorno. David Morrissey, como el ambicioso líder romano Aulus Plautius, ofrece una actuación poderosa que agrega un matiz intrigante al conflicto. Sin embargo, algunos personajes, como el druida Veran (Mackenzie Crook), parecen perder protagonismo en favor de nuevas incorporaciones, lo que puede decepcionar a los fanáticos que esperaban ver un desarrollo más profundo de sus arcos.
La música y el sonido también juegan un papel fundamental en la atmósfera de la serie. La banda sonora, compuesta por un conjunto de sonidos celtas y romanos, complementa perfectamente la narrativa, sumergiendo al espectador en la historia. Sin embargo, en algunos momentos, la música puede resultar abrumadora, restando protagonismo a los diálogos cruciales.
En resumen, la tercera temporada de "Britannia" ofrece un viaje emocionante y visualmente deslumbrante a través de un mundo en conflicto. Aunque presenta algunas inconsistencias en la narrativa y el desarrollo de personajes, sigue siendo una propuesta intrigante para los amantes de la fantasía y la historia. Con un final que deja abiertas muchas posibilidades para futuras temporadas, "Britannia" continúa demostrando que tiene mucho que ofrecer, siempre y cuando logre equilibrar su ambición con la profundidad narrativa que los espectadores desean.